MÁS CONSEJITOS PARA EL CUIDADO DE SUS JOYAS....

Para el oro y el platino: Evita el amoniáco, la tintura de yodo y el mercurio. Simplemente limpia tus joyas con agua y jabón o con alcohol.

Para la plata: Límpialas con un cepillo suave y un poco de agua jabonosa o zumo de limón. Acláralas con agua caliente. Ahora sólo te queda darles un poco de brillo con una gamuza.

Si están sucias, también puedes elaborar tú misma la poción, con agua, lavavajillas desengrasante y un poco de lejía, que es más corrosiva con la suciedad. Atención: nunca utilices disolvente, productos abrasivos ni productos de limpieza de cubiertos de plata, ya que estropean las joyas más rápido.Tampoco utilices estropajos, sólo un tejido suave.

Para conservar joyas con piedras: En primer lugar, mira si la piedra tiene alguna raya, para saber si la puedes limpiar con normalidad o si necesita un cuidado especial.

En general, se limpian con agua jabonosa y un paño suave, y se secan con un trapo suave. Para conseguir un brillo excepcional, se pueden mojar con alcohol.

¿Qué clase de aretes se recomiendan para cada tipo de rostro?

Existe una gran cantidad de factores, estilos y colores que se pueden combinar cuando se trata de elegir accesorios, y los aretes tienen la función estética de enmarcar el rostro. A continuación les mostraré algunos consejos generales en cuanto a la forma y el estilo de los aretes recomendados para favorecer la belleza natural de cada tipo de rostro.

Rostro Triangular:

El tipo más recomendado para este tipo de rostro son los que tienen un diseño ancho y alargado. En general, se recomienda evitar aretes alargados angostos ya que generan la ilusión óptica de alargar el rostro. Así que puedes optar por cualquier clase de aretes, ya sean largos o medianos, que sean un poco anchos de preferencia, para sacar mejor provecho de tus atributos.

Rostro Cuadrado:

En este caso lo ideal es elegir aretes de un tamaño moderado y con contornos redondeados, teniendo especial cuidado de que no lleguen a la mandíbula ya que en este caso tienden a resaltar el ángulo de esta región del rostro y crear una ilusión óptica de tener una mandíbula más acentuada. Así que selecciona aretes pequeños y que de preferencia sean redondos para buscar un balance estético.

Rostro Redondo:

De preferencia se deben usar aretes que sean alargados y con formas diferentes de las circulares para buscar un equilibrio y una ilusión óptica de un rostro más alargado. Se aconseja evitar los aretes pequeños y redondos que generan una apariencia de tener una cara más redonda aún.

Rostro Ovalado:

En este caso se cuenta con una mayor libertad a la hora de elegir estilos en base a la forma del rostro, pero siempre se debe tener en cuenta el balance y la feminidad para generar una combinación hermosa. No hay restricciones especificas a una forma o estilo, se puede optar por el estilo que más te guste.